Gn 25:19-28 - "La Soberanía de Dios y una mala respuesta a Su gracia" - Serie Génesis No. 52

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INTRODUCCIÓN

Hace pocos días salió una noticia en la prensa. Una madre ebria golpeó con un fierro a su pequeño hijo lastimándolo severamente.
¿Por qué hay madres y padres que destrozan la vida de sus hijos con sus malas decisiones? ¿Sabías que hay también mujeres que por algún motivo no pueden concebir, que darían lo que fuese por tener un hijo, amarlo y verlo crecer?
A veces parece la vida injusta con el tema de los hijos. Quienes parecen no merecerlo pueden tenerlos y quienes quieren tenerlos muchas veces no pueden. ¿Dónde está el Señor en todo esto? ¿Qué significa Soberanía de Dios? y ¿podemos descansar y confiar plenamente en Él?
Y hay otras preguntas que son difíciles también. ¿Qué responsabilidad tenemos ante nuestros hijos, familias y ante Dios como padres y madres? ¿Hemos pedido al Señor por una familia, por un hijo o hija y hemos fracasado totalmente como padres cuando el Señor así nos lo ha concedido?
La Biblia tiene respuestas para nosotros y esta porción de la Escritura continua con el tema general y principal: “La salvación del Señor a través de Jesucristo a través de las promesas realizadas a Abraham y su descendencia” y a su vez, nos encontraremos con otro tema específico y particular “La respuesta de los hombres como padres y madres a la gracia recibida en nuestros hijos”.
El título del mensaje de hoy es: “La Soberanía de Dios y una mala respuesta a Su Gracia” y está basado en Génesis 25.19-28. Y si necesitas del Señor en tu vida, si tenemos humildad para reconocer que necesitamos de Cristo y estamos dispuestos a abrir nuestro corazón a Su Palabra, entonces, veremos al Señor obrando en varias áreas de nuestra vida.

EXÉGESIS Gn 25:19-28

Génesis 25.19 RVR60
19 Estos son los descendientes de Isaac hijo de Abraham: Abraham engendró a Isaac,
La Biblia está mostrando lo que siempre ha sido importante mostrar. La descendencia de aquel que escogió Dios para formar un pueblo, es decir a Abraham. ¿Por qué Dios escogió formar un pueblo de entre todos los pueblos de la tierra a partir de Abraham?
Cuatro motivos importantes:
Porque aunque el mundo se olvidó del Creador, Dios estaba cumpliendo sus propósitos para la humanidad de tener comunión con el hombre y cumplir su promesa de salvación.
Esto quiere decir que el Señor eligió un pueblo por el cuál se cumpliría la primera promesa de salvación que está en Génesis 3:15. El Señor cumple sus promesas a pesar de la desobediencia del hombre, esto es gracia.
Dios escogió un pueblo para establecer su Ley y Su Palabra, de tal manera que Las Escrituras perduren en el tiempo por un remanente celoso de Su Palabra. De esa forma hoy tenemos la Biblia.
Dios escogió un pueblo sobre el cuál su gracia descendería de forma especial mostrando a los otros pueblos la veracidad de Dios como Creador y como Señor absoluto, como evidencia de Su existencia, Su misericordia y juicio a todas las naciones.
Dios escogió un pueblo para que a partir de este pueblo se abran las bendiciones a toda la humanidad por la preservación de la línea mesiánica y por tanto la apertura de salvación a todas las familias de la tierra que crean en el Señor Jesucristo. En los designios del Señor y en su Omnisciencia, el rechazo de una parte de Israel a Dios abriría las puertas para que otros sean tomados como hijos, es decir los otros pueblos o nosotros.
Entonces, cuando la Biblia habla de la Historia de Abraham o Isaac, está enseñando los propósitos de Dios como evidencia de Su Existencia y como argumento de juicio para los que no crean en Él.
..Estos son los descendientes de Isaac hijo de Abraham..” - Realmente existió Isaac y existió Abraham. Tal vez sean ignorados por muchos, puestos en duda por otros, pero es la historia bíblica que está confirmando que efectivamente el Señor está detrás de la Creación y tiene propósitos con ella y que esto es irrefutable.
..Abraham engendró a Isaac.” - El hijo de la promesa es Isaac. El es el hijo por el cuál se cumpliría los cuatro propósitos del Señor que hemos mencionado al elegir un pueblo llamado Israel. Abraham tuvo varios hijos, pero en la Soberanía de Dios estaba establecer todos sus propósitos y promesas a través de Isaac. ¿Te das cuenta qué importante es conocer todo esta historia del Antiguo Testamento?
¿Les has hablado a tus hijos de Abraham o de Isaac? A veces llenamos las mentes de nuestros hijos o nietos de todo lo que es posible llenar, de cosas sin sentido muchas veces, de juegos, de moralidad, aún de lo que parece ser buena enseñanza, pero, ¿les hemos hablado de la historia de la Biblia? ¿Saben tus hijos que Dios fue tan bueno con gente tan mala que escogió a Abraham e Isaac para que a través de ellos vengan bendiciones a todas las familias? ¿Saben que a través de este pueblo vino Jesucristo a Salvarnos?
Necesitamos pasar más tiempo con nuestros hijos o nietos y hablarles de lo precioso que es el Antiguo Testamento y cómo abre las puertas al Nuevo Testamento para recordar a nuestros hijos que hay un Creador, un Señor y un Salvador. No van a hablar de esto en las escuelas. En los colegios nadie mencionará a Abraham o Isaac y mucho menos la condenación del hombre y tampoco su salvación. Nosotros como padres tenemos esta tarea.
Génesis 25.20 RVR60
20 y era Isaac de cuarenta años cuando tomó por mujer a Rebeca, hija de Betuel arameo de Padan-aram, hermana de Labán arameo.
Anteriormente no habíamos tenido una referencia de la edad de Isaac cuando Abraham envió a su siervo para tomar una esposa para su hijo en Mesopotamia. Rebeca era hija de Betuel y tenía un hermano que había sido importante para la historia estudiada que era Labán. Sin embargo, ahora podemos ver que Isaac tenía cuarenta años y este versículo es una referencia de algo importante que va a suceder. Porque si bien Isaac y Rebeca se habían unido en matrimonio las cosas no eran tan fáciles:
Génesis 25.21 RVR60
21 Y oró Isaac a Jehová por su mujer, que era estéril; y lo aceptó Jehová, y concibió Rebeca su mujer.
La esposa de Isaac, es decir, Rebeca, era estéril. Nuevamente se repite algo similar a la historia de Sara. Esto nos llama la atención bastante ya que estamos siguiendo los rastros de una genealogía bendecida, es decir, de la simiente de la mujer de Génesis 3:15, que debe ir hasta la llegada de aquel que vencerá a la serpiente que es el Señor Jesucristo. Pero, ¡Qué difícil todo esto! Esta línea de descendientes al parecer tiene bastantes dificultades. Isaac y Rebeca han heredado la promesas de Abraham, las conocen, las llevan como suyas y saben que uno de sus hijos será heredero de la promesa también. ¿Pero cuál hijo si no pueden tener uno?
Rebeca es estéril y aunque esto parece mostrar presunta dificultad a los planes de Dios. La verdad es que siempre el Señor ha mostrado su grandeza y obra en estas situaciones. “Y oró Isaac a Jehová por su mujer..” - Esto quiere decir que Isaac y Rebeca están unidos en esta situación. El esposo se identifica con el sufrimiento de la esposa, así como es también suyo y es un matrimonio que busca al Señor y pide misericordia. Es importante este versículo para comprender lo que sucederá en esta porción de la Escritura. Se observa un matrimonio que inicia bien, pero esto no los salvará de grandes errores que tendrán más adelante. Isaac reconoce que en esta situación él y Rebeca no pueden hacer nada sino tan solo pedir al Señor para que pueda oír y atender sus ruegos. Con seguridad que conocerán cómo Sara, la madre de Isaac, fue bendecida en una situación similar. Isaac es el resultado de esperar en el Señor y ahora Isaac también quiere hacerlo. Realmente tomaron la decisión correcta de buscar al Señor.
“..y lo aceptó Jehová, y concibió Rebeca su mujer.” - En la soberanía de Dios, Quien tiene el control sobre todas las cosas, en Sus designios estaba permitir que Rebeca pueda concebir. Se requería fe para ello y acudir al Creador y en este versículo Isaac lo había hecho. Nuevamente tenemos un buen comienzo para ambos como padres, se habían acercado al Señor, sobre todo sabiendo que recibieron grandes propósitos heredados de Abraham.
Como veremos más adelante, fueron 20 años que Isaac y Rebeca tuvieron que esperar y confiar en el Señor para ser padres. 20 años donde la esterilidad no permitió que Rebeca pueda concebir hasta que el Señor así lo aceptó.
Los hijos son bendiciones que vienen de parte del Señor y entonces, tenemos gran responsabilidad sobre ellos. Son bendiciones que nos van a traer también un juicio de responsabilidades si no sabemos encaminarlos en el Señor.
El Señor es Soberano. En este caso y de acuerdo a sus propósitos permite concebir a Rebeca. En algunos casos no obra así el Señor a pesar de la oración. No podemos dar una respuesta de por qué. La mente del Señor es más grande que la nuestra, pero sí podemos decir una cosa que está revelada en Su Palabra: Aún con la negativa puedes confiar en que Dios tiene propósitos en tu vida que Su Soberanía, Voluntad y Santidad han establecido. Sí puedes descansar en el Señor cualquiera sea la situación.
Génesis 25.22 RVR60
22 Y los hijos luchaban dentro de ella; y dijo: Si es así, ¿para qué vivo yo? Y fue a consultar a Jehová;
El autor de Génesis conoce de esta tensa relación entre Esaú y Jacob. En el vientre de Rebeca hay hermanos gemelos.
Y los hijos luchaban dentro de ella..” - Desde que estaban dentro de la madre había dificultades entre estos dos hermanos. A pesar de que ambos son hijos de los mismos padres, padres de las promesas heredadas de Abraham, eso no les hace participantes o herederos de esas promesas. Los hijos toman sus decisiones y muchas veces distintas causas como la carne, el pecado, la vanagloria, la voluntad propia y otros, hacen que sus propósitos se alejen de los propósitos de la familia. En este versículo tenemos el relato de dos hijos que nacerán en una misma casa pero que tendrán rumbos distintos.
“..y dijo: Si es así, ¿para qué vivo yo? Y fue a consultar a Jehová;” - Esta parte ya es la alarma de que algo no anda del todo bien en aquella madre. La situación es difícil, puede sentirlo en su vientre pero esta situación está ganándole la batalla y llega a la desesperación. Hay muchas cosas que tus hijos pueden hacer, aún desde pequeños o niños, pero mucho tendrá que pasar por tus manos para permitirlo o no. La madre entra en desesperación aún cuando no han nacido, de tal manera que cuestiona el motivo de su vida, aún cuando ha recibido la gracia del Señor para concebir. Sin embargo, a pesar de ese sentimiento, sí obra bien en “ir a consultar a Jehová”. Esta fue una buena decisión ante un mal manejo de la situación.
No sabemos cómo es que consulta a Jehová. Es posible que fuese por algún profeta, tal vez en un espacio directo en un altar de adoración, o posiblemente a través de Abraham. Aunque tenemos el relato bíblico de la muerte de Abraham, por la edad de Isaac y lo que se describe de la muerte de Abraham, al menos por 16 años gozó Abraham de sus nietos y pudo conocerlos en ese periodo y después murió. En la Escritura a veces se describen sucesos por un significado especial y no necesariamente en orden cronológico y eso es lo que sucedió en versículos anteriores al describir la muerte de Abraham.
Génesis 25.23 RVR60
23 y le respondió Jehová: Dos naciones hay en tu seno, Y dos pueblos serán divididos desde tus entrañas; El un pueblo será más fuerte que el otro pueblo, Y el mayor servirá al menor.
Nuevamente la soberanía de Dios se manifiesta en las promesas hechas a Abraham y ahora a Isaac. Dos bebés estaban en camino. Cada uno de ellos iba a ser un padre de muchedumbre y de un pueblo. El mayor “Esaú” iba a ser padre de los edomitas (Gn 36.1) e Isaac al igual que Abraham padre de los israelitas. Dos pueblos que se iban a separar y algún momento iba a haber momentos críticos entre estos pueblos.
Pero por los propósitos del Señor de preservar para sí un pueblo suyo y de bendición a todas las familias de la tierra como hemos descrito al inicio, Dios en su Soberanía elige a quien continuará con las promesas de Génesis 3:15. Jacob es elegido por el Señor para preservar la línea mesiánica y el pueblo de Israel vendría de él. Entonces de esta manera el “mayor servirá al menor”. Es una referencia de la decisión soberana de Dios de cómo iban a formarse estos pueblos. El pueblo de Israel es el más fuerte, tiene a Dios de bandera y escudo y ya hemos dicho algunos propósitos de por qué Dios lo decide así, y el mayor servirá al menor establece la jerarquía en todo esto.
Esto es sumamente importante para entender lo que sucederá en siguientes pasajes de la Escritura. Ya que ahora Isaac y Rebeca saben los designios soberanos de Dios y llegado el momento tendrán que tomar decisiones sobre ello. Dios ha elegido a Jacob para recibir la bendición heredada de Abraham. ¿Será que los padres piensan lo mismo?
Génesis 25.24 RVR60
24 Cuando se cumplieron sus días para dar a luz, he aquí había gemelos en su vientre.
El tiempo iba pasando y en el vientre de Rebeca estaban creciendo por la gracia de Dios dos niños Esaú y Jacob. Ellos son gemelos, muy parecidos físicamente pero con rasgos que los hacen únicos. Se van a describir algunos de ellos, pero sobre todo es interesante cómo estos jóvenes se desarrollarán. Uno será más parecido a la madre y otro más parecido al padre.
Esaú tendrá un temperamento fuerte, hombre de campo y sagaz y en todo esto será parecido a su madre a excepción de la nobleza de Rebeca. Mientras Jacob es bastante sencillo en relación a su hermano, será tranquilo, un joven más astuto que operará con inteligencia muchas veces para bien otras para mal. En su tranquilidad es más parecido a Isaac.
Génesis 25.25 RVR60
25 Y salió el primero rubio, y era todo velludo como una pelliza; y llamaron su nombre Esaú.
El primero en nacer es rubio, tiene la piel muy clara y dice la Escritura que era velludo como “pelliza”. Una pelliza es una túnica y las túnicas se hacen en este tiempo de piel de animales. Entonces tenemos una piel de animal totalmente recubierta de pelo como una principal prenda de vestir y así compara la descripción al cuerpo del hermano mayor.
Culturalmente consideraban que el nombre tenía mucha importancia sobre la vida del nacido o que podía de alguna manera incidir en ella y Esaú en realidad significa “velloso”. Es el hijo mayor y seguramente al nacer sus padres estarán recordando una verdad que el Señor ya había establecido. Vendrá un pueblo de él pero servirá al menor.
La oración de Isaac había sido escuchada por el Señor y la esterilidad había sido vencida y dos niños estaban naciendo. Dios había respondido la oración de este padre y había consolado el dolor de la mujer estéril.
Génesis 25.26 RVR60
26 Después salió su hermano, trabada su mano al calcañar de Esaú; y fue llamado su nombre Jacob. Y era Isaac de edad de sesenta años cuando ella los dio a luz.
El segundo en nacer es Jacob. Este no es velloso pero se menciona algo particular en este nacimiento. La Escritura dice que su mano estaba trabada al calcañar de Esaú. Desde el vientre estos hermanos estaban en lucha y esta es una descripción de la relación que se tenía aún desde tan pequeños.
Es difícil imaginar esta escena: ¿Su mano trabada? Estuve estudiando un poco sobre nacimiento de gemelos y algunos doctores me dijeron que el tiempo de parto o nacimiento en estos casos podría ser 30 minutos de diferencia o hasta en muchos casos algunas horas. A veces y solamente bajo ciertas condiciones podría haber un tiempo de diferencia de minutos. Esto hace difícil que la escena sea de dos bebes uno agarrando al otro saliendo del vientre. Sino que parece ser la idea del autor la descripción de la rivalidad de estos pequeños. El nombre “Jacob” significa “aquel que toma por el talón y también significa suplantador”. Hay discusión sobre el significado relacionado al talón, pero hay mayor acuerdo con “suplantador”. En todo caso, los padres tuvieron que ver algo en el momento del parto para dar el nombre “Jacob” a su hijo y la Escritura describe la escena de la mano en el calcañar. Dejamos esta interrogante a las manos del Señor por nuestras mentes limitadas.
Pero sí sabemos algo. Jacob realmente será un “engañador” como lo veremos mucho más adelante. Este nombre le quedará muy bien. Será un suplantador.
..Y era Isaac de edad de sesenta años cuando ella los dio a luz”. - Lo que habíamos dicho anteriormente sobre los 20 años de espera para poder tener hijos es confirmado con este texto. Fueron 20 años que esperaron hasta que el Señor decidió darles hijos a esta pareja.
La Escritura no está describiendo lo que sucede al momento de nacer solamente por mencionarlo, sino que todo esto tiene un especial sentido. El mayor, es decir Esaú, era el heredero por naturaleza, era el hermano mayor y esto para la época no tendría que estar en discusión, sin embargo, recordamos que Dios en su Soberanía había escogido al menor para recibir la herencia espiritual de Abraham e Isaac. Hay rivalidad entre los hermanos. ¿Cuál será la mejor decisión de los padres? ¿Cómo actuarán? ¿Qué harías tú como padre en situaciones de rivalidad entre hermanos?
Génesis 25.27 RVR60
27 Y crecieron los niños, y Esaú fue diestro en la caza, hombre del campo; pero Jacob era varón quieto, que habitaba en tiendas.
Los niños crecieron y ahora la Escritura describe cómo era cada uno de ellos. Esaú era un hombre que pasaba gran tiempo fuera de casa. Era un hombre fuerte y dedicado a la caza, mientras su hermano era bastante distinto. Jacob era un hombre más tranquilo, quieto, que habitaba en las tiendas, es decir, que prefería estar en casa.
Ya lo habíamos dicho. Esaú parecer haber recibido el temperamento de la madre (menos su nobleza) y Jacob el temperamento tranquilo del padre.
Son gemelos, comparten muchas cosas, son hijos de los mismos padres, pero en el fondo también son distintos. En esta porción de la Escritura no hemos visto el corazón de cada uno de ellos pero vamos a ver esto el siguiente domingo. Sin embargo, lo que sí podemos decir es que en esta casa, las cosas no van a terminar bien. Son hermanos, pero serán “enemigos”.
¿Qué sucede en esta familia que las cosas se irán descontrolando poco a poco? Probablemente la respuesta está en el siguiente versículo.
Génesis 25.28 RVR60
28 Y amó Isaac a Esaú, porque comía de su caza; mas Rebeca amaba a Jacob.
Este es el fracaso de los padres y de una familia. El amor no es igual hacia todos los miembros del hogar, de forma específica de los padres hacia los hijos. Y donde sucede todo esto también habrá caída y complicaciones en casa.
Y amó Isaac a Esaú, porque comía de su caza..” - Este es el motivo que la Biblia indica del amor más grande del padre por uno de sus hijos. Isaac tiene preferencia y el motivo simplemente es que uno de ellos le favorece en su hambre. ¡Qué triste motivo!. De hecho, no debería haber motivo alguno para amar a un hijo más que a otro. Pero la realidad de Isaac es que ama más a uno porque le da de comer. Por otro lado, tenemos a una mujer que ha hecho exactamente lo contrario. No se nos da motivo. No sabemos si es como respuesta a la preferencia de un padre por su primogénito, pero sí sabemos que la madre también ama a uno más que al otro. Dice la Escritura: “..mas Rebeca amaba a Jacob”.
Tenemos una triste escena familiar. Con corazones divididos no puede haber unidad y por tanto esta familia ya tiene contados los días para dañar sus relaciones interpersonales y familiares mucho más. Tan solo es una bomba de tiempo que va a explotar un día en los actos desaprobados de todas las partes.
Hay un problema mayor que veremos más adelante, que tiene que ver con la prioridad de la bendición o ser heredero principal de Isaac, sobre todo de la herencia espiritual. El Señor en su Sabiduría, Inteligencia, Conocimiento Previo y sobre todo Soberanía, había decidido que la herencia espiritual era para el menor y los problemas se presentarán cuando se tenga una lucha por esto donde no solamente los hijos están involucrados sino también los padres.

MEDITEMOS EN LA PALABRA

Hemos estudiado una porción de la Escritura que tiene varias escenas bastantes emotivas. Todo el consejo de la Palabra de Dios es importante y debe hacer cambios en nuestra vida. Hay mucho por aprender de esta porción de la Escritura. Recuerda que no estamos estudiando un texto tan solo por rellenar un espacio en el culto, sino que estamos convencidos que Dios nos habla a través de la Biblia. Esperamos que la Escritura, la Palabra del Señor transforme nuestras vidas.
Algunas aplicaciones para el día de hoy.

El Señor cumple sus propósitos y está atento a la necesidad humana y a un matrimonio que confía en Él.

Isaac y Rebeca estuvieron 20 años sin poder tener un hijo. Rebeca no pudo concebir y entonces buscaron al Señor. El Señor respondió al clamor de este matrimonio. El Señor siempre ha estado atento y con los oídos prestos cuando un varón intercede por su esposa y cuando una esposa busca al Señor. Las necesidades de los matrimonios son comprendidas por el Señor mientras sean parte de Su Voluntad y planes.
¿Cuántos matrimonios hay en esta congregación que están entregados a Jesucristo? Como esposo o varón ¿Te preocupas por el bienestar, dolor y necesidades de tu esposa y las encomiendas al Señor? ¿Estás pendiente del sufrimiento de tu esposa por algunos temas, te has interesado en ello y sobre todo has buscado al Señor por Su Voluntad? Isaac hizo esto y encontró una respuesta en el Señor.
Encomienda tu vida, tu matrimonio, las necesidades, los problemas, el deseo de tener una familia, hijos, encomienda la vida de tu esposa, esposo e hijos al Señor. Él responderá.
El Señor dio una bendición especial a Isaac y Rebeca al hacerlos padres de dos niños. Todos nosotros debemos estar convencidos y seguros que Dios obrará en nuestras vidas y que nuestro dolor está siempre presente en la mente del Señor.
Puedes confiar en Él, buscar refugio en el Señor y Él oirá tu pedido. Pero también ten la suficiente fortaleza y sabiduría para aceptar el SI del Señor y el NO del Señor. Recuerda que sus planes son más perfectos que los nuestros.
1 Juan 5.14 RVR60
14 Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.

Confía en la Soberanía del Señor, porque Él tiene planes y propósitos. A veces te será difícil entender pero puedes descansar en Él.

No mencionar la Soberanía del Señor en esta parte de la Escritura sería ignorar un tema principal de toda la Biblia.
El Señor respondió con dos hijos al pedido de la concepción de los padres. En los planes de Jehová estaba dos pueblos que serían divididos desde las entrañas de la madre y el mayor serviría al menor. Esto se llama: Soberanía de Dios. ¿Por qué dos pueblos? ¿Por qué no juntos? ¿Por qué el mayor sirve al menor y no al revés? Soberanía de Dios. ¿Será que el Señor lo decidió así tan solo porque quiso? ¿Será que fue conociendo el corazón y las obras que estudiaremos después de Esaú y de Jacob? ¿Hubo algún motivo del Señor para escoger a Jacob para continuar con las promesas realizadas a Abraham? No lo sabemos. Pero SÍ sabemos algo. Él siempre actúa de acuerdo a su carácter, atributos y perfecciones. Es decir, si así lo decidió, fue porque en su Santidad, Inteligencia, Omnisciencia y Soberanía sabía que era lo mejor y correcto. Y en eso sí podemos descansar tranquilos. Dice la Escritura:
Malaquías 1.2–3 RVR60
2 Yo os he amado, dice Jehová; y dijisteis: ¿En qué nos amaste? ¿No era Esaú hermano de Jacob? dice Jehová. Y amé a Jacob, 3 y a Esaú aborrecí, y convertí sus montes en desolación, y abandoné su heredad para los chacales del desierto.
En Malaquías el Señor dice que amó a Jacob y a Esaú aborreció. ¿Por qué Dios hizo eso? Soberanía es la respuesta. El amor de los padres desequilibrado iba a traer conflictos, pero Dios no tiene un amor desequilibrado. Más adelante tenemos una posible respuesta a la decisión del Señor, sin embargo, confiamos totalmente en Su Soberanía:
Malaquías 1.4 RVR60
4 Cuando Edom dijere: Nos hemos empobrecido, pero volveremos a edificar lo arruinado; así ha dicho Jehová de los ejércitos: Ellos edificarán, y yo destruiré; y les llamarán territorio de impiedad, y pueblo contra el cual Jehová está indignado para siempre.
El Señor está indignado con los edomitas o el pueblo de Esaú. Dice estos versículos que está indignado por la impiedad, es decir, por la maldad que hay en ellos. El Señor tiene razones en Su soberanía que a lo mejor no son compartidas con nosotros para elegir que el mayor sirva al menor.
Confía plenamente en el Señor. Jehová estaba mostrando sus propósitos al pueblo de Israel. Fueron amados grandemente. Y no puedes dudar jamás de su Soberanía, ni Santidad, ni juicio.
¿Quieres una evidencia de Su Soberanía? La cruz, un madero donde Jesucristo, Hijo de Dios, la Segunda Persona de la Trinidad entrega Su Vida por amor a los pecadores. Donde muere el justo por el injusto, por ti y por mi. Esto es también Soberanía. No dudes nunca de ella, porque por Su Soberanía eres salvo o puedes serlo el día de hoy a través del sacrificio de amor de Cristo. Soberanía también es amor, misericordia, salvación, así como justicia y santidad.
Rebeca se preguntó: “Si es así, ¿para qué vivo yo?” - La respuesta de Dios muchas veces no se ajustará a nuestros pensamientos o deseos, pero ten por seguro que las decisiones que tomemos a partir de todo esto va a ser elemento de juicio ante un DIOS SANTO.
Rebeca conocía la promesa, ella era heredera de las promesas espirituales de Sara y Abraham, pero su mente al igual que la nuestra era limitada. No descanses en tu mente, no busques tus caminos, busca los del Señor, en ellos, aún sean difíciles a veces, hay paz y vida eterna.
Proverbios 3.5–6 RVR60
5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. 6 Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.
Otra aplicación que descansa en la Soberanía de Dios es la esterilidad. Hay mujeres que no pueden tener hijos o matrimonios que por algún motivo no pueden tenerlos. La respuesta en el caso de Isaac y Rebeca fue un Si, pero no siempre va a ser esa la respuesta en todos los casos. También a esto se llama Soberanía de Dios. Hay cosas que no podemos comprender y que pueden causar lágrimas y dolor en nuestras vidas, pero aún así, el Señor nos está invitando a confiar en Él plenamente. Llegará un día donde Él tendrá para todos nosotros respuestas a distintas situaciones que hemos atravesado y entonces nos quedaremos maravillados una vez más de la Gracia del Señor para nuestras vidas. Hoy y mientras estemos en este mundo, Él nos invita a confiar en Él, adorarlo y ser partícipe de sus planes con la iglesia. No perdamos de vista lo que Sí sabemos por lo que aún desconocemos. Y sí sabemos que su amor es tan grande como el tamaño de una cruz. Vale la pena esperar completamente en el Señor y Su Soberanía. Nuevamente: “Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderazará tus veredas”.

La mala respuesta del hombre a la gracia de Dios de la familia se manifiesta en la desigualdad de amor de los padres a los hijos.

El Señor respondió la oración de Isaac y en realidad el ruego de ambos padres por la esterilidad. La gracia del Señor fue expresada en oraciones contestadas. ¿Pero cuál fue la respuesta de Isaac y Rebeca hacia el favor recibido? La respuesta fue: Un descuido como padres, al exponer a sus hijos por la carencia de igualdad en el amor familiar.
Isaac amaba a Esaú porque él llenaba su necesidad de hambre y Rebeca amaba a Jacob. Sin duda alguna, la desintegración familiar está a la puerta y es lo que vamos a ver en los siguientes domingos.
Padres y madres de esta congregación, no se ama más a un hijo que a otro. A veces uno se encariña más con uno por ciertas cuestiones, experiencias, eventos pasados, primeras experiencias y otras cosas, pero no podemos generar grandes conflictos en nuestra casa y rivalidades en nuestros hijos por un amor desigual de unos con otros.
Ama a tus hijos de la misma manera. No ames más a uno que a otro. Tus hijos son la bendición del Señor.
Salmo 127.3 RVR60
3 He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre.
¿Cómo respondes a la herencia de Jehová? ¿Cómo respondes a la bendición que el Señor te ha dado? ¿Acaso hiriéndoles más de lo que hará el mundo? Has recibido a tus hijos como herencia del Señor al igual que Rebeca e Isaac. Pero estos padres no dieron un amor igual, sino que expusieron a sus hijos y vamos a estudiar pronto que las cosas se descontrolaron grandemente. Había rivalidad entre los hijos y respondemos ¿amando más a uno que a otro? Tan solo alimentamos a una bomba de tiempo que destruirá a nuestros hijos. ¿Estas siendo un padre o madre equitativo, justo o justa con todos tus hijos? ¿Tienes preferidos o preferidas? Entonces estás pisando terrenos muy peligrosos para una posible desintegración de tu familia. En muchos casos por la gracia del Señor tu familia no se desintegrará pero vas a hacer heridas a tus hijos o hijas que tal vez lo van a guardar y vivir en silencio sobre preferencias y falta de amor de sus padres.
¿Qué estás haciendo como padre o madre por tus hijos? ¿Les has hablado del Salvador Jesucristo y de su gracia preciosa? A veces como padre respondemos mal a su gracia, es decir, a la bendición que nos ha dado en nuestros hijos.
Realmente necesitamos comprender que el Señor tiene propósitos, que es Soberano, pero que siempre obra para bien y que oirá la voz de quienes clamen a Él, de los matrimonios que clamen a Él, y que espera que en respuesta podamos bendecir a nuestros hijos, cuidarlos, amarlos a todos por igual, y encaminarlos a su bendita gracia de la cruz en Cristo Jesús.
Si te has equivocado como padre o madre alguna vez, o si has tropezado con la Soberanía del Señor a causa de no ser igual a tus planes, vamos a orar y entregarnos a Él. Él Sí puede transformarnos. Cristo sí puede darnos vida. Oremos.
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